“Una ciudad de moda no es una entidad
económica”
— VALERIE STEEL —
Frecuentemente oímos
hablar de lo superficial de la moda, pudiendo decir que en realidad lo es, ya
que esta habla de lo que hacemos para alterar la superficie de nuestros cuerpos
y no del interior de ellos. Pero nuestro interior complejo se refleja en la
moda. Es por eso que ese calificativo de superficial, de la moda, en ningún
momento es sinónimo de lo simple. Superficiales podemos llamar a los políticos
que se cubren de discursos pero en su actuar son vacíos.
Veo la convocatoria
publica 2014 Arte y Cultura para la Vida
antes Becas para la Creación Artística y
Cultural y no hablaré aquí de los cambios, no es el espacio, pero si
reiteraré la falta de estímulos para la creación artística en el área de moda.
En el pasado hemos encontrado estímulos en fotografía relacionados con la arquitectura
para estar acorde con algún evento mundial del tema que sucedería en los meses siguientes,
así mismo este año encuentro una” Beca de creación artística enfocada a la
prevención del embarazo adolescente” tema de gran importancia debido a sus
graves repercusiones sociales.
Entonces sí se pueden
enfocar en temas específicos: ¿Por qué la moda que recibe visitantes dos veces
al año no tiene espacio para una beca de creación? más aún si la administración
de la ciudad, en sus discursos, dice apoyar la vocación de Medellín como ciudad
de moda.
Así mismo en días pasados
confirmé lo difícil que puede ser acceder a algunos espacios públicos, en
algunos casos manejados por fundaciones, por ejemplo la estación del Ferrocarril
de Antioquia, la cual maneja y controla la Fundación Ferrocarril de Antioquia de
la cual “Un año después de su creación se vinculó en calidad de fundador
adherente, el Municipio de Medellín.” (La cita corresponde a la página de la Fundación)
así mismo más adelante en la página manifiestan que “trabajamos en la difusión
de nuestra cultura patrimonial“. Si facilitar
un espacio para hacer un editorial de moda para una revista no clasifica como
un medio de la difusión de la cultura patrimonial, y más una revista con amplio
tiraje y circulación. Me queda difícil entender como dan cumplimiento a dicha
tarea.
Creo que cuando hablan de
divulgación no está circunscrita al ámbito arquitectónico, sino a diferentes
medios que permitan llegar a otros públicos. Ese espacio no creo sea exclusivo
para la arquitectura, y en ese sentido creo muestra la falta de una cultura de
moda, y editorial, más arraigada en la ciudad. Lo cual resulta siendo el tema
de fondo de esta entrada.
Creo que los espacios
públicos, y aquellas organizaciones que reciben fondos del municipio deberían
tener unas políticas claras desde la Alcaldía, que ayuda a su subsistencia como
organizaciones, al respecto de cuando se presta una locación sabiendo que se
tendrá como contraprestación la divulgación de algunos de los valores con los
que esta comprometida la ciudad, así mismo en cuales momentos se cobra ya que
el fin de la imagen será mucho más comercial. He de aclarar que en el pasado
usé y se pagó por el uso de la estación del Ferrocarril de Antioquia para la
elaboración de un catálogo y para tal fin me parece que pagar una locación es
totalmente válido, al fin de cuentas esas imágenes se están utilizando para
vender el producto en concreto que aparece en las imágenes.
Por otro lado en las
fotos editoriales aunque se muestran muchas cosas, no está en el negocio de
vender lo que aparece en la imagen; está comunicando una idea sobre la que desarrollan
las fotos. Tengo claro que se vende una revista, pero en la revista más que
productos se venden ideas y en este caso la materialización de un vestido, que
es tan importante como la materialización de una locación. En una publicación
de novias, la novia que la ve, no solo se antoja de vestidos y peinados, se
antoja de la locación y toda una serie de productos afines.
Es tan importante mostrar
lo nuestro que hay varias organizaciones haciendo lobby para que las publicaciones internacionales saquen una sola página
donde se hable bien de Colombia, así mismo muchas organizaciones nacionales
hacen lo propio como un método de apoyar el turismo y posicionar las diferentes
regiones. Al final puedo afirmar que se
perdió un espacio para mostrar una de nuestras joyas arquitectónicas, además
que podía haber desembocado en un nuevo uso para ese bello espacio de la
ciudad. Porque si hablamos de dinero para la fundación, es mejor fuente de
ingresos alquilarlo para bodas con cierta regularidad que para editoriales en
los cuales los espacios tienen ciclos de uso determinados por varios fenómenos.
Señor alcalde, ya lo dice
la señora Valerie Steel, una autoridad en el tema de moda, de pronto poniéndolo
en sus palabras la idea genera al interior de su administración una reflexión
mas profunda: “una ciudad de moda no es una entidad económica” construir una
ciudad de moda no es solo apoyar las industrias que manufacturan productos de
moda para exportar; es entender la moda como un fenómeno aún más complejo, no
solo de actividad económica, sino también cultural; apoyar no solo la
manufactura, y el diseño, sino también fenómenos mas abstractos relacionados
con la creación de imaginarios de moda, que no tienen que ver directamente con
la creación de empleos, sino con la creación de ideas; ideas que se transforman
y logran que las ciudades tengan algo que contar. Porque si es por la manufactura
de productos de moda, Asia tendría ya muchas capitales de moda.
A usted que tanto le
gustan los calificativos para Medellín tales como ciudad innovadora o ciudad
iluminada, para lograr el “Medellín ciudad de moda” es necesario que los
discursos se apoyan con hechos en todos los frentes. De otra manera se puede
terminar pareciendo superficial, asunto para el que la gente de la moda, ya tenemos
calibrado el ojo.
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