The Constructed Moment

This blog discusses the way in which we design, make, select, evaluate and publish fashion and advertisement photographies as a sub-genre. This is a place of reflection. We have no unveiled truths, yet we are seeking answers.


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viernes, 29 de mayo de 2015

De editores y editoriales de moda.





Nuestro problema básico radica no en la imitación de las apariencias,
sino en la falta  de conocimiento de los procesos que las logran




Las palabras editar, editor y editorial inicialmente se refieren a la acciones relacionadas con los medios impresos.

La palabra editorial se refiere al artículo de fondo de un medio impreso, una de las versiones mas populares de los editoriales son aquellas en las que los medios defienden una postura y aunque la RAE diga que no es firmado, con el paso del tiempo la definición de orientaciones de los medios pasa de ser un asunto de sus tendencias políticas y en aras de la independencia de estos queda a cargo del director general y empieza a aparecer firmada generalmente bajo el titulo de carta del director o algún nombre similar.

Cuando pensamos en los editores, aunque con funciones diferentes de acuerdo al editor que nos ocupe: cinematográficos, de televisión, literarios y los de moda, encontramos que todos ellos tienen en común su tarea de seleccionar y agrupar,  para su presentación final un material disponible: léase material fílmico, escritos y productos de moda respectivamente. El editor de moda por ejemplo selecciona entre los diferentes eventos de moda o desfiles cuales deben ser reseñados en su publicación y para tal fin, por razones de espacio de impresión debe seleccionar los vestidos, accesorios, complementos entre otros que considere aparecerán impresos.

Esta selección de productos se publica de diferentes maneras: en algunos casos van solos reseñados muy parecido a lo que llamamos la foto de catálogo, en otros con ayuda de estilistas y/o directores de arte se realizan en la forma de Still life, como  ejemplo están las cada vez mas frecuentes ediciones de accesorios y complementos de revistas como Vogue y similares. Por último algunos productos terminan siendo reseñados en una de los apartes principales de la publicación llamado historia de moda, o editorial de moda;  sección que retoma las formas de los foto reportajes que introdujeron revistas como Vu, y Life tratando de establecer una narración visual para presentar una serie de productos seleccionados por un editor de moda para tal fin. El criterio de selección mas popular en la actualidad son las tendencias de moda, pero son válidos otros criterios que el editor considere pertinentes, por ejemplo, el hacer un homenaje a determinado diseñador o hacer una recopilación de algún tipo de prendas con alguna característica específica.

Desde los comienzos de Vogue, Conde Nast con la ayuda de el Dr Agha en los inicios y Alexander Lieberman de 1944 a 1961[i] como sus directores artísticos y del lado de Harper's Bazaar Alexey Brodovitch con igual tarea, estuvieron en la búsqueda y ayudaron a la formación del talento de fotógrafos que hoy son fundamentales para la historia de la fotografía de moda; nombres como Beaton, Munkacsi, Steichen, Avedon y Penn por citar algunos. La función de esta nueva generación de fotógrafos de moda para las revistas era desde su inicio producir imágenes llamativas que ilustraran los productos que en ellas aparecían, razón por la cual hasta nuestros días y en búsqueda de esa novedad son las revistas las que más libertad creativa otorgan a sus fotógrafos para ilustrar las imágenes de moda. 

Es por eso que el editorial de moda como tal no solo se reduce a una tradición fotográfica asociada a una cantidad de imágenes heredadas de los ensayos fotográficos del foto-reportaje. Se refiere principalmente a una selección de objetos  que hablan del estado actual de los productos de la industria, y es en ese discurso de aquello que nos presenta y no en la cantidad de fotos que esta la razón de llamarlo “de moda”.

Asi que no se confundan llamando editorial de moda a una serie de fotos de una misma prenda donde no hay un discurso de moda y tampoco un discurso fotográfico ya que en un ejercicio serio solo una de esas fotos sobreviviría para ilustrar la prenda y las otras por mas buenas que pudieran ser, no serian publicadas. También es necesario entender que la moda como industria se debe a la comercialización repetitiva de productos y que el fin de los editoriales de moda es la presentación de la ultima versión de estos,  y si la única prenda de su editorial es sacada de algún armario por favor piénselo dos veces antes de llamar a esa serie de fotos de una prenda de armario, un editorial de moda. 




editar.
(Del fr. éditer).
1. tr. Publicar por medio de la imprenta o por otros procedimientos una obra, periódico, folleto, mapa, etc.
2. tr. Pagar y administrar una publicación.
3. tr. Adaptar un texto a las normas de estilo de una publicación.
4. tr. Organizar las grabaciones originales para la emisión de un programa de radio o televisión.
5. tr. Inform. Hacer visible en pantalla un archivo.


editor, ra.
(Del lat. edĭtor, -ōris).
1. adj. Que edita.
2. adj. Inform. Dicho de un programa: Que permite redactar, corregir, archivar, etc., textos registrados en ficheros de símbolos. U. t. c. s. m.
3. m. y f. Persona que publica por medio de la imprenta u otro procedimiento una obra, ajena por lo regular, un periódico, un disco, etc., multiplicando los ejemplares.
4. m. y f. Persona que edita o adapta un texto.
~ responsable.
1. m. y f. Persona que, con arreglo a las leyes, firmaba todos los números de los periódicos políticos y respondía de su contenido, aunque estuvieran redactados por otros.
2. m. y f. coloq. Persona que se da o pasa por autor de lo que otro u otros hacen.



editorial.
1. adj. Perteneciente o relativo a editores o ediciones.
2. m. Artículo de fondo no firmado.
3. f. Casa editora.


Real Academia Española © Todos



[i] Luego del 1961 pasa a ser director editorial de publicaciones Condé Nast en Estados Unidos y Europa




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jueves, 27 de noviembre de 2014

A mí que me expliquen





“¡Plop!”

“¡Exijo una explicación!”
— Condorito —






Esta entrada no podrá llamarse “fue Gol de James II” ya que en realidad califica más en la categoría de Autogol y no precisamente de James sino de sus empleadores, en este caso: el Grupo Éxito.

En la entrada anterior sobre la primera campaña de James para Bronzini (link) decía que las fotos eran buenas, pero no estaban a la altura —en términos de imagen— de otras campañas que se han realizado con futbolistas para grandes marcas, y en la comparación presentaba diferencias en campañas teniendo en cuenta culturas y segmentos de público. Además es necesario aclarar que cuando hablaba de lo que considero los errores de esa primera campaña, hacía notar que la responsabilidad cae en quienes manejan la imagen de la marca más que en el fotógrafo. La aclaración es necesaria pues en muchos casos como fotógrafos cargamos con la responsabilidad de hacer malas fotos y el público no alcanza a percibir las dificultades que encontramos, no solo por lo material (modelos, espacios, equipo físico y de trabajo ajustados a un presupuesto) sino por la capacidad de entendimiento de la imagen y sus códigos de comunicación de parte del cliente.

A veces notamos imágenes más exitosas de pequeñas marcas que trabajan con las uñas, pero que son capaces de realizar fotografías mas evocadoras. Perdonen lo simplista, pero la siguiente frase es ideal para entender el punto: “imágenes que parecen más internacionales” que las imágenes con participación internacional que construye el Grupo Éxito. No solo las campañas con James sino también algunas de Alessandra Ambrosio, de las cuales escribí en este blog hasta que me cansé.

Ahora llega la segunda campaña de James para la marca Bronzini del grupo éxito y mantengo mi opinión. Algo falla al interior del Éxito en el manejo de la imagen de sus marcas más grandes, no sé si sea mucha gente opinando o la convicción de que, por ser un producto de orientación popular, las imágenes deben ser de orientación popular. Esta última afirmación no la comparto para todos los casos y menos para Arkitect y Bronzini.

Iniciemos con las fotos que hasta el momento se conocen de esta segunda campaña. 


Ahora mencionemos que el fotógrafo de estas imágenes es Greg Lotus, (Link) y cuando miro su trabajo es evidente que estamos hablando de un fotógrafo de primer nivel y, para no alargarme en explicaciones, lo diré así: ningún pelagatos llegaría a las páginas de Vogue Italia. (Suficiente información sobre su nivel como fotógrafo.)

Pero el nivel de un fotógrafo no es todo, porque hay fotógrafos del mismo nivel con estéticas diferentes, en otras palabras: no se debe seleccionar a un fotógrafo porque es famoso, sino porque su trabajo es acorde a las necesidades de la imagen a realizar. En ese orden de ideas, veamos el material de Mr. Lotus y cómo realiza sus trabajos en la categoría que nos ocupa hoy.


Y para complementar la idea, demos una mirada general a su trabajo.


Y una mirada, también general, a la lo que hace en moda masculina.


Además, para evitar que crean que la selección puede estar sesgada comparto un tablero de su trabajo en Pinterest (Link)

Después de esta evidencia, saco tres conclusiones que deben ser evidentes más allá de la obvia excelencia del trabajo del fotógrafo:

1 Generalmente, el trabajo del fotógrafo con hombres en categorías similares y con orientación editorial (más en vestidos de baño que en ropa interior) es en exteriores, trata de usar la luz natural y recurre con frecuencia al agua como complemento para sus imágenes, además de que se nota una ligera predilección por el blanco y negro.

2. Cuando ampliamos la revisión, percibimos que es un fotógrafo que nos presenta imágenes donde describe elegancia, glamour y sofisticación[i] con una realización impecable y con iluminaciones tradicionales que puede llegar a ser dramáticas. Podemos también percibir que hay un componente importante de trabajo en color, estudio e interiores, a diferencia de lo observado en lo masculino.

3 Revisando su trabajo con hombres en otros universos de vestuario, lo elegante se mantiene aunque aparecen características más casuales y otras con manejo de estudio, en ambos casos perfectamente realizadas.
Luego de estas conclusiones y viendo el resultado, llegan las preguntas inevitables:

¿Qué fue lo que llamó la atención del trabajo de Greg Lotus para que se le asignara este proyecto? y ¿por qué terminan haciendo las fotos de campaña en lo que parece un apartamento vacío, si en su trabajo no hay nada que indique que este es su fuerte?

En caso de que su respuesta al leer estos cuestionamientos sea “es que se buscaba una espacio más popular, acorde al público de la marca”, traigo otra pregunta: ¿Por qué seleccionar a un fotógrafo que muestra una predisposición a la fotografía glamurosa y elegante, si la intención estética es lo popular?

Y si el lector agrega que Lotus ha trabajado para marcas populares como Papi, añadiría una pregunta más: ¿Notan que esas imágenes tienen un componente sexual (homo y hétero) asociado que no es factible realizar con James Rodríguez por ser posicionado como un hombre de familia? Agregaría más como comentario extra: ¿Notaron que el espacio usado en la campaña de Papi es mejor que el usado para Bronzini ?



Aceptando finalmente que Greg Lotus fue el fotógrafo a cargo de esta campaña, continuaré mis cuestionamientos.

¿Cuál era la idea inicial para la realización de las imágenes?
¿Tuvieron en cuenta la opinión del fotógrafo para decidir el mejor rumbo de la campaña?
¿La producción suministró el tiempo, espacio y condiciones adecuadas para que el fotógrafo pudiera realizar su trabajo?
¿Cómo llegaron a ese espacio y qué esperaban que este aportara a la imagen?
¿Consideraron hacer unas fotos en estudio como una continuación de la campaña anterior y así permitir que el fotógrafo imprimiera su sello a la campaña?  

Llego a este cuestionamiento porque la campaña es pobre y las fotos parecen tomadas por un fotógrafo emergente en un apartamento en Madrid. No alcanzan el nivel del fotógrafo, del modelo o del impacto económico y mediático que tiene una marca del Éxito. El grupo que respalda esta campaña es fuerte en plaza, precio y producto, pero en promoción aún muestra falencias, al menos con respecto a recursos fotográficos. Mi conclusión en este caso es similar a la emitida anteriormente sobre las primeras imágenes de la campaña.

Seria ideal que esto se subsanara para que cuando hablemos de la ultima campaña de almacenes Éxito, la mencionemos con el asombro de que producen los grandes grupos económicos cuando se aplican en crear imágenes impactantes y no con la incredulidad que produce un contenido que, a pesar de tener nombres de primer nivel, deja mucho qué desear.







[i] Las tres palabras aunque similares, presentan diferencias, la elegancia se entiende más sencilla y natural sin las afectaciones o elaboraciones que puede tener la sofisticación o la sensualidad del glamour






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miércoles, 14 de mayo de 2014

Podría ser una imagen de campaña.


Text in english, here




“Lo que me gusta acerca de la fotografía es que captura un momento efímero, imposible de reproducir
 Karl Lagerfeld 



“Mi relación con los productores y fotógrafos, es una relación que tomo años.”
Alexander McQueen 




Hay cosas que me cogen por sorpresa, ya que no estoy pendiente de los diseñadores y sus colecciones con la avidez que manifiestan u obliga a muchos personajes de la industria. Mi asunto es mas lo fotográfico pero en este momento tampoco estoy en uno de esos ciclos de búsqueda asidua para conocer nuevos fotógrafos y sus trabajos.

En otras palabras: por estar desinformado, o mejor —en estos días— mas concentrado en los textos que en la imagen, hay cosas que en su momento me cogen fuera de base, por ejemplo: las fotos del tan polémico desfile de Chanel en el supermercado. He de confesar que al ver las primeras imágenes en las redes creí que eran sobre su última campaña y no su último desfile. Pero eso no es todo: he de confesar que en ese momento, me encantaron las fotos de esa última campaña. (Tanto que escribo de ellas varias semanas después cuando el evento ya no es noticia pero la reflexión que permite me parece sigue siendo pertinente).



Luego de caer en cuenta a que se referían las imágenes, una admiración cambio por otra: para mi es una de las mejores puestas en escena de desfiles que he visto en los últimos tiempos, y no me refiero al asunto de presupuesto, el cual sabemos casi ilimitado y que se manifiesta no solo en el maravilloso surtido de los estantes sino principalmente en la solución del espacio el cual no solo permitió a los invitados ver cómodamente la colección sino que permitió a los fotógrafos y camarógrafos realizar unas imágenes tan buenas que en algunos casos son superiores a muchas imágenes de campañas que vemos para diferentes marcas de moda.

Y he de aclarar que no estoy proponiendo que las fotos de campaña sean de las imágenes de los desfiles, aunque en algunos casos donde el resultado de las imágenes es de gran calidad no me parece mala idea.

El punto es reflexionar es el compromiso por parte de los organizadores de un desfile de aumentar las posibilidades de realización de buenas imágenes por parte de los fotógrafos y camarógrafos presentes. Creo no hay lugar a duda que un desfile es un evento para la prensa y los principales compradores. El asunto que a veces creo no todos tienen tan claro, es que el desfile no es solo sobre el bienestar y las relaciones publicas con los directores de medios que están en las primeras filas del evento, también es de igual importancia para la comunicación que se espera lograr que  la calidad de las imágenes que se logren en el permitirán acompañar las opiniones de los editores de moda presentes. De algo similar, la baja calidad de las imágenes que se producen en la primera fila hablamos hace días en otra entrada. (Link)
Seguramente es cierto que hay eventos que serán informados sin importar mucho la calidad del material que presenten, mas no todos califican para este tipo de excepciones, y de alguna manera los jugadores que están esperando destacarse y utilizar la prensa a su favor con seguridad necesitaran que la calidad de las imágenes de su evento sea superior a la media.

Es claro que una cosa es un evento único desarrollado desde cero en un espacio y con una puesta en escena exclusiva como el de Chanel y los desfiles de las principales casas de moda, y otra muy distinta los eventos como los que suceden en una misma pasarela por ejemplo nuestras pasarelas en Colombiamoda. Hago la anotación porque ya me imagino, dentro de ese espíritu de copia de lo que funciona afuera y se presenta como un descreste adentro a los venteros ambulantes en el centro de una de nuestras futuras pasarelas.

Pero la reflexión de fondo es la misma y no es nueva en este blog: a veces creo, y con suficiente información por estar ahí ocasionalmente, que los organizadores de los desfiles trabajan con la lógica de que todos los que están en la tarima de prensa están obligado a tomar las fotos y los editores a publicarlas como si no hubiera unos estándares técnicos y estéticos que esas imágenes deben ofrecer. Al respecto les digo a mis estudiantes que no es lo mismo ser seleccionado por la prensa local para la cual es evento es noticia obligada que para la prensa internacional la cual tiene material de todo el mundo para reseñar. De lo anterior hay casos publicados en este blog link

Ya para terminar les dejo las imágenes  de otro desfile, el de Alexander McQueen F/W 2014 de las cuales algunas también podrían ser imagen de campaña. O al menos son mejores que muchas que son construidas por otros con tal fin.


Al final no creo que sea coincidencia, ambas marcas tienen una cultura manifiesta y gran conocimiento sobre como funciona la imagen fotográfica. 






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martes, 19 de noviembre de 2013

Sobre las colecciones.


“Como es arriba es abajo.”


La fotografía de moda como herramienta comercial ilustra colecciones y tendencias, nos muestra productos generalmente en piezas que pueden ser catálogos, editoriales, anuncio publicitarios, cada una con un objetivo distinto: los catálogos nos muestran los productos, los editoriales la tendencia y la publicidad nos habla principalmente de la marca. Diferentes sujetos para diferentes mensajes.

Pero creo las diferencias principales terminan ahí, la estructura de estas imágenes de moda es general a los diferentes piezas que con ella estructuramos, un catálogo, un editorial, una campaña publicitaria (y para mí en esta última la imagen de una marca) las cuales son colecciones de imágenes que se rigen por ciertas normas no muy lejanas a las que los diseñadores usan para hacer sus propias colecciones: evidentemente hay un tema, una paleta de colores, una descripción de siluetas, una definición de mujer que se perfecciona con el estilismo. Formas, volúmenes y texturas también pueden hacer parte de ese universo que se construye en la imagen fotográfica, de la misma manera que lo hace en una colección.

Es por eso que me extraña cada que veo colecciones de fotos de moda donde estas reglas de construcción no se respetan; así como al evaluar las colecciones de un diseñador la gente del medio nos habla de la historia que cuenta y justifican que tal atuendo se salía de los lineamientos de la colección. Creo la habilidad para evaluar la coherencia de una colección y una serie fotográfica no es tan distante, para un público informado eso debería ser casi una lectura obligatoria.

Es por lo anterior que creo que los diseñadores, editores de moda y otros actores informados de la industria están llamados a ser editores fotográficos, no en términos de evaluar cada fotografía, sino en entender el conjunto de imágenes que se elaboran y presentan al público.

En muchos medios aprecio excelentes imágenes que se salen de la historia de la colección, una buena foto en la que su propia espectacularidad, termina socavando el resto del trabajo, y convirtiendo la colección en una: historia mal contada. Así las llamamos desde la narrativa fotográfica pero también oigo que las llaman los críticos de moda refiriéndose a algunas colecciones de diseñadores.

Revistas como Vu y mas adelante Life dieron vida al reportaje gráfico, una narración a partir de un grupo de fotografías que profundizaba en un tema de una manera que la imagen periodística no lo lograba. Mientras esta última condensaba un momento determinante de la acción el reportaje gráfico profundizaba en algún aspecto a partir de una serie de fotos realizadas con un sentido específico. No es coincidencia que esa narrativa haya llegado a la moda, en la revista Vu trabajo el reconocido Alexander Libermam, quien mas adelante fuera el director creativo de Vogue Americana.

Y no solamente en los fotoreportajes, las series fotográficas, otra forma de colección donde los elementos de conexión de la obra no son temáticos sino estéticos, nos hablan de esa necesidad de otorgar lineamientos a las colecciones que armamos.


De otra manera, podremos llamar colección a cualquier grupo desordenado de cosas.



             ♠

miércoles, 7 de agosto de 2013

Tres desfiles.



“Por hacer bonito hizo feo”
—POPULAR—




Siempre al terminar un evento hay miles de análisis, lo que funcionó, lo que no, los mejores momentos y los que no lo fueron. Al respecto, creo que Colombiamoda nos ha presentado una pasarela madura, como organización está ofreciendo a quienes tienen la oportunidad de mostrar sus colecciones en ella una pasarela solucionada casi en su totalidad, sin embargo eso no garantiza que la presentación de las marcas o los diseñadores en los diferentes desfiles sea de una calidad uniforme y acorde con lo que la organización está entregando.

Por mi parte creo  necesario reseñar los siguientes tres desfiles como los de más baja calidad en la feria, obviamente en el sentido de análisis de este blog, ósea: la luz, el registro y la puesta en escena, elementos todos fundamentales para el registro fotográfico.


1  Tennis. Por su  mala iluminación, irregular en muchos momentos, rematado por  una actitud de los modelos en pasarela que más que novedosa termina siendo la repetición de un cliché.


Inicialmente destaco  el hecho de integrar dos pasarelas para poder llegar a un mayor público y sin duda hacerlo uno de los desfiles más populares de la feria. Me parece un gran acierto y seguramente en ese afán de lo popular montar un par de seguidoras para iluminar las salidas parece una decisión lógica, pero en términos de registro fotográfico: desacertada.  Las luces seguidoras presentaron  diferentes temperaturas  de color, seguramente por la diferencia de edades de las bombillas de cada equipo o sus respectivos balastros, alguien con más conocimiento técnico al respecto a su funcionamiento podrá dar la verdadera razón de ello.  Así mismo la iluminación en muchos momentos fue irregular en su intensidad lo que obligaba a ajustar las imágenes para presentarlas o en algunos casos descartarlas ya que los modelos y/o las prendas quedaban mal iluminadas.
Otro elemento adicional fue el final de la pasarela, la actitud grosera de los modelos, esa forma de ilustrar irreverencia ante las camaras tal vez en aras de mostrar un espíritu rebelde no paso de ser un estereotipo aburrido, una reverencia a la irreverencia (tengo mis dudas si se entiende), que más que parecer novedosa y contestataria termino siendo un culto a un sistema establecido, una manifestación de crisis creativa.  Me gustaría ver si esa actitud logro una imagen publicada en un medio impreso, sería una forma de medir su éxito. 

En definitiva, respecto al  año pasado  se retrocedió en calidad de iluminación, las imágenes de este año piden un esfuerzo adicional para convertirlas en unas buenas imágenes.



Momentos de mala iluminación en la pasarela, imágenes que toca descartar por inconsistencia de la iluminación.

Final de pasarela. "El espíritu Tennis"




2  Velez. Por un desfile largo, con un esquema de iluminación confuso, un desfile de poca luz para un producto que para su excelente registro requiere de mucha luz.

He de reconocer que es un desfile más difícil que el anterior, creo sinceramente que una pasarela de accesorios siempre será más difícil de realizar que una de vestuario.  Pero de todas maneras no fue la mejor pasarela de la marca, creo trataron de darle espectacularidad con una iluminación que seguía (por no ser con seguidoras es mejor decir que se encendían en la medida que pasaban) los modelos. 

Ese seguir los modelos con la iluminación no es fácil, en algunos momentos se vio descoordinación dejando a los modelos fuera de la cobertura de la luz, principalmente de la de contraluz, lo que dificultó aún más el registro. Dudo seriamente que la iluminación estuviera diseñada para tal exigencia; así como decorar el espacio con un piso, visualmente muy interesante, que se perdió en el efecto de iluminación logrado, lo cual termina siendo un desperdicio escenográfico. Crearon un ambiente oscuro que no destacaba el producto que mostraban.  Y que no me digan que no querían mostrar el producto, porque el largo del desfile lo hacía parecer una muestra de inventario más que una presentación de estilos y tendencias. 
En determinado momento un par de modelos hicieron algo que creo correcto y deberían tomar en cuenta: se pararon de lado y mostraron perfectamente el bolso que tenían, un acto aislado que nos deja cosas claras.


Diferentes momentos del desfile, todas las imágenes con los mismos ajustes.
Observen como la falta del contraluz hace que la modelo se confunda con el fondo. 


Imágenes con los mismos ajustes de las anteriores.
Muy buena la imagen de la izquierda.
Noten la iluminación irregular en la luz frontal de el sujeto de la derecha,
aunque el contraluz funciono y lo separa del fondo.
Miren el piso, lo vieron en las fotos anteriores?


En los dos desfiles anteriores creo es una constante que en aras del espectáculo renunciaron a una excelente iluminación. Lo decía en la entrada anterior, creo que los diseñadores y las marcas se “empeliculan” demasiado tratando de diferenciar la pasarela dentro de un esquema que es montado en unas características fijas y en este esfuerzo la mayoría logran deteriorar el montaje que les entregan para el desarrollo de su desfile. 

Yo aun no entiendo como teniendo una iluminación de pasarela diseñada por uno de los mejores personajes en esa categoría en el mundo, alguien decide cambiarla: ¿con que criterio se decide estos cambios? ¿Quién toma dichas decisiones? ¿Entienden lo que afectan esas decisiones la manera en la que se va a registrar el desfile? ¿Consultaron con los que diseñaron la iluminación que pueden ofrecer o impusieron sus ideas? ¿Tienen el conocimiento para entender las implicaciones de lo que solicitan en la iluminación?  O lo piden porque lo vieron en algún lado y les pareció interesante sin saber todo lo que implica? Porque una cosa es ver un esquema de iluminación para un desfile de un diseñador extranjero que seguramente fue diseñado, montado y probado específicamente para ese fin y otra tratar de adaptar un esquema de feria que no tiene ese diseño en específico. 

Una de las cosas que tenemos que aprender de trabajar con los mejores es a hacerles caso en sus recomendaciones eso da razón a la frase aquella, la ignorancia es atrevida.


3  Polite. Por hacer un excelente desfile para el público pero que no entendió la iluminación que el espacio ofrecía y no definió un momento adecuado para el registro de la prensa. 

Sin duda alguna un excelente desfile para los espectadores, pero uno de los peores para las cámaras. En este caso lo diferenciaremos de los anteriores en que no hubo un cambio de luz,  trabajando con la luz que el evento ofrecía, pero el montaje tal como se hizo y debido al ancho del separador central, obligo a las modelos a caminar por fuera de la cobertura de la luz lo que al final produjo el mismo resultado: una iluminación inconsistente que alteró el registro de la colección.
Así mismo el performance o recorrido de la pasarela no previó un momento de registro de las prendas. Expliquemos: cuando una modelo viene caminando en una pasarela sin obstáculos el fotógrafo o camarógrafo define en que momento hace el registro ya sea desde el comienzo, intermedio o la pose final. Así mismo por haber tantos momentos, esa pose final puede ser eliminada, es por eso que se observa en algunos desfiles modelos que llegan al final de su recorrido y retornan sin detenerse.
Pero en este caso el montaje al centro de la pasarela, estorbaba, obstruía, hacía imposible la mayoría de esos momentos; lo que dejaba como único instante para las fotos cuando ellas sobrepasaban el montaje, pero en ese lapso se cruzaban sin detenerse lo que imposibilito un buen registro.
Al final, el ancho del objeto central que era la causa de la mala iluminación en el recorrido  pudo haber sido un marco perfecto para una imagen de la modelo mirando de frente enmarcada por los personajes del performance inicial. Unos cuantos segundos, una pequeña variación en el recorrido y un giro hacia las cámaras separaron este desfile de ser uno de los de mejor registro e imágenes más interesantes (esas cosas que buscan los medios para publicar, especialmente los periódicos) a uno de los de peor registro. Ver imagen de montaje.


En la pasarela hacia las camaras las modelos debían caminar por el área de transición de la luz y
al cruzarse frente a estos sin mirar no daban oportunidad a un buen registro de las prendas. 
ESTA IMAGEN ES UN MONTAJE.
Con mínimas variaciones en la coreografía de las modelos se hubiera podido lograr esta imagen,
la cual hubiera podido ser un excelente registro del evento y las prendas.


Obviamente en un desfile hay muchos públicos y creo es su función tratar de satisfacerlos  a todos, así mismo sigo creyendo que las imágenes que hacemos son parte importante del evento, unas buenas imágenes siempre tendrán más posibilidades de generar una mayor cubrimiento y seducir a un editor que esté interesado en darle reconocimiento a una colección que fue de su interés.


Definitivamente, sin fotos no hay recuerdo.




                                                              •

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Son 150







"El espíritu de descubrimiento y la celebración de lo singular y nuevo es lo que hace a una gran editora."
    MARC JACOBS —
Sobre Diana Vreeland




“Mi papel en una revista consiste en concebir la mezcla adecuada de los diferentes temas y estilos de los fotógrafos”
— DONAL SCHNEIDER —
Director artístico de Vogue Francia 1994- 2002






A punto de dejar de circular su edición 150, y ya en línea, no podía dejar de pasar la oportunidad de escribir nuevamente acerca de Soho. Si se preguntan porque la menciono permanentemente en el blog, es básicamente por dos razones: la primera es una de las revistas más vistas en el país donde frecuentemente se habla de la calidad de sus fotografías. La segunda es que creo que al estar en esa posición mucho de lo que en ella se hace termina siendo legitimado. Tanto lo bueno como lo malo, y es eso ultimo lo que a veces me preocupa consiente de la importancia de los medios impresos para el desarrollo de la fotográfica como arte y/o medio comercial.
Aclarado lo anterior lo diré cortamente: me gustó mucho la Soho 150, en su contenido más no en su forma.


Es de destacar y aplaudir que este número promociona la variedad en la estética femenina, belleza cotidiana lo llaman ellos, y de alguna manera mitiga el constante bombardeo de cuerpos perfectos,  aunque creo se puede decir, el mismo cuerpo puesto en diferentes rostros. Aclaro también que eso de cuerpos perfectos  es altamente discutible y es una posición que no lo defenderé.  (Para aclarar mi posición acerca de este punto pueden ver una entrada anterior.)

Íbamos entonces en que la variedad de cuerpos presentados en este número se convierte en un mensaje positivo, no se necesita el llamado cuerpo prototipo para ser bella, como diría el refrán , “ en la variedad está el placer” y este número trata de llenarnos de variedad, al menos en cuanto a modelos se refiere.

Pero la forma fotográfica me deja un sinsabor, parece que los fotógrafos colombianos, o al menos los de Soho, solo son capaces de hacer esta imagen cotidiana de rincón de casa con recursos técnicos pocamente elaborados?  A lo largo de sus 150 números la revista nos había presentado diferentes estéticas, pero estas cada vez se ven menos y parece empieza a predominar esta solución de la imagen. Si la revista habla de variedad ¿porque las diferentes estéticas para la elaboración la imagen no están representadas en este número?  Y aclaro que no tengo nada contra estas imágenes domésticas, lo que discuto aquí es una receta que resulta muy repetitiva, que ofrece muy poca variedad y más si tenemos en cuenta que es un numero demasiado grande.

Desde la portada se ve cómo será el postre diría Chespirito confundiendo un par de refranes, pero no la idea central que quiero expresar. Pongo en colación una serie de fotos de varios fotógrafos para que ustedes juzguen mi punto, me encanta la modelo de portada, odie el acabado chapucero de la imagen. ¿Porque no hacer una foto altamente seductora?  ¿es que ella no lo merecía?, ¿es que era difícil de hacer? ¿Es que no queríamos comunicar que la diversidad puede ser seductora? 



Porque a veces creo que en ese exceso de cotidianidad se está escondiendo una falta de elaboración técnica y conceptual, la cual puede ser util en algunos casos y del gusto de muchos pero no de todos y menos para un número tan extenso. Pareciera que una gran parte de las imágenes fueran de la categoría amateur de cualquier sitio erótico y no de la revista erótica mejor posicionada en este país. Miro por ejemplo la modelo 107 Ana Maria Cano, por cierto imágenes sin crédito, algo se destaca de esas imágenes, son una pausa en el camino, el negro y la luz frontal las hacen algo diferentes. Esa es la sensación de sorpresa, la que creo debió haber tenido todo el número,  no solo una sorpresa en la mujer presentada en cada imagen  sino en la estética fotográfica que se seleccionaba para acompañarla. 

Así hubiéramos tenido una verdadera celebración de la diversidad.



Pd
Les dejo este link para que miren variedad estética para el tema del desnudo.