The Constructed Moment

This blog discusses the way in which we design, make, select, evaluate and publish fashion and advertisement photographies as a sub-genre. This is a place of reflection. We have no unveiled truths, yet we are seeking answers.


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viernes, 30 de noviembre de 2012

Un tema recurrente




“La fotografía publicitaria … le exige una adaptabilidad a los intereses comerciales que tienen por finalidad el aumento de las ventas o servicios.”
— JOSÉ MANUEL SUSPERREGUI —


“Se trata de un trabajo en equipo donde confluyen multitud de seres sensibles, hacer que se cree un lugar de diálogo es tarea del fotógrafo.”
— JUAN L. SANTA-CRUZ. —




Hay temas que son recurrentes, y uno de ellos es el de los diferentes roles y nuestro desempeño como equipo de trabajo en una sesión de fotografía de moda. 

Aunque inicio esta entrada con la idea que hay clientes de los cuales no comprendo el criterio con el que escogen a la modelo y como permiten que ella con sus caprichos acerca de su presencia desdibujen la imagen de las  compañías para las que trabajan, lo cual creo un tema ya tratado.

En entradas pasadas hemos hablado del papel de las modelos de su importancia para concretar la imagen. Que en realidad el valor de la modelo radica en su capacidad de identificarse con el grupo social al cual va dirigida la imagen y/o poder encarnar el rol que de ella se requiere para la elaboración de la fotografía.  Que no necesitamos divas/modelos sino modelos comprometidas con la imagen.

De los fotógrafos hemos dicho que en muchos momentos deben poner su conocimiento técnico y estético en función de la estética de la marca para la que trabajan.  Y similar podemos decir de estilistas, maquilladores y peinadores. Todos están reunidos en función de la imagen que se ha de realizar para un cliente, y dependiendo de este cliente y los consumidores finales, los clientes del cliente,  la libertad creativa pude ser mayor o menor,  pero a eso hemos de atenernos cuando realizamos un trabajo comercial.
Asi mismo cuando hablamos de los clientes y fotógrafos a veces es difícil entender los criterios con los que estos nos seleccionan, por ejemplo: como clientes que supuestamente tienen una imagen diferenciada la contratan como si fuera una fotografía de volumen.

Porque si nosotros reflexionamos sobre nuestra responsabilidad como integrantes del equipo de trabajo, debemos hablar también de la responsabilidad de los clientes, ellos están obligados a saber lo que quieren y como lo deben lograr, así mismo evitar que la sesión se desvié de sus intereses comerciales pero entendiendo que se trabaja con un  equipo creativo al cual hay que comunicarle claramente sus necesidades como forma de encausar esa creatividad. Un cliente no debería permitir que los egos u otro intereses de aquellos que trabajan para el entorpezcan la materialización de su labor comercial que se da en una sesión fotográfica. Pero para eso deben entender mejor la imagen y su construcción o comunicar claramente sus necesidades y entregar su confianza en su construcción al equipo que eligió para la realización del trabajo.  Es claro que el conoce el cliente final mejor que nadie, pero que el equipo de trabajo puede conocer de la realización de la imagen mejor que él, por más catálogos y producciones que haga al año seguramente uno hará muchas más.

Necesitamos de reflexionar sobre la profesionalización del sector, como una manera de todos podamos disponer de mejores condiciones para la realización de nuestras respectivas actividades.  Porque fuera de una manera de ganar dinero con nuestro trabajo, este sector es, para muchos, también un medio de crecimiento personal. 

Pero esa reflexión no es solo para nosotros y nuestros equipos de trabajo, es también para los clientes. Porque si nosotros nos preguntamos ¿qué es lo que estamos haciendo?, saben ellos ¿qué es lo que están comprando?




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miércoles, 9 de noviembre de 2011

Créditos y equipo de trabajo



“Un saludo a mi papa, mi mama y todos  mis patrocinadores”


  “Uno de los males de esta vida, es la falta de reconocimiento a las personas que día a día dan algo de sus vidas para que los otros tengan lo que tienen.”
— LUIS GABRIEL CARRILLO NAVAS — 

A veces sucede así en la vida: cuando son los caballos los que han trabajado, es el cochero el que recibe la propina.
— DAME DAPHNE DU MAURIER —


Desde hace días, vengo pensando en varios asuntos acerca del uso de nuestras imágenes en las redes sociales, y me refiero a nuestras porque al final del día pertenecen a todos los integrantes del grupo que en ellas plasmaron su trabajo. 

Lejos han quedado esos días donde el crédito de la imagen era solo del fotógrafo, en los años 40 por ejemplo, la mayoría de las modelos se maquillaban y peinaban solas, el maquillador y peinador fue uno de los primeros integrantes del equipo para la creación de la imagen.

Hoy el equipo de trabajo no solo cuenta con maquilladores y peinadores, que por cierto en nuestra ciudad son generalmente la misma persona pero es muy común que sean dos personas cada una especializada en una parte del trabajo.  Tal vez una de las causas de eso es que nuestra fotografía de moda está más orientada al catálogo y la exigencia acerca del peinado es muy poca. En mi caso siempre el peinado es un criterio superior al maquillaje, y por eso siempre he seleccionado al mejor peinador posible antes que al mejor maquillador posible, aunque actualmente trabajo con personas que se desempeñan, simultáneamente,  de manera excelente en las dos áreas tal como lo pide esta ciudad. Aunque mantengo el deseo de un equipo de trabajo especializado en cada área, las restricciones económicas de esta ciudad no lo permiten.

Los productores: son otra parte importante del equipo, son ellos los encargados de materializar la idea. En algunos casos, estos son muy variados, de seleccionar a todos los integrantes incluidos el fotógrafo. Son ellos los encargados no solo de la conceptualización de la pieza, en muchos casos con el fotógrafo, o director de arte, pero también en algunos de ellos con el cliente y son los que trasmiten los objetivos del trabajo al resto del equipo.

Los estilistas, o el especialista en Styling. Diferente al maquillador peinador, aunque siempre me han sonado similares, el estilista es uno de los más recientes integrantes del equipo, su función es solucionar la presencia de la modelo, (ver una epifanía)  vestuario, maquillaje, peinado, (estos dos últimos de manera conceptual con los respectivos maquilladores peinadores) “El estilista trabaja siempre con los productos que diseñan los creadores de moda, por ese motivo ha de comprender a la perfección su trabajo ya que de él se derivan ya no sólo los productos sino también las temáticas  a trabajar cada temporada”[i]

La modelo: de ella hemos escrito tanto, es el centro de la imagen de moda en la forma de la mujer que ella representa.  Dejo el link de algunas de las entradas acerca del tema para los que quieran profundizar sobre el asunto. (El efecto zoolander, Modelos y agencias, Diva/Modelo y Modelos, actrices, bailarinas)

Enuncio además de otros personajes que poco encontramos en nuestras producciones:

Directores de arte: este es uno de los que me refiero cuando digo que poco encontramos, no porque el crédito no aparezca con frecuencia, sino porque el trabajo que va tras este crédito pocas veces se ve, la mayoría de nuestros directores de arte terminan siendo unos asistentes de composición fotográfica y no cumplen con las condiciones básicas: una amplia visión del arte para poder referenciar correctamente los detalles de toda la producción además de una capacidad para entender la imagen como una herramienta de comunicación. “Un director de arte debe tener profundos conocimientos de semiótica, narración gráfica y fotográfica, forma y color, percepción, conceptboard y su desarrollo gráfico, ambientación, fotografía, óptica e iluminación.”[ii]

El escenógrafo: en nuestro caso casis siempre cae en la producción, en el mío casi siempre he sido yo con mis productores o con el jefe de estudio,  pero con la tendencia de la fotografía construida obliga a una reflexión importante sobre el espacio, mis estudiantes de fotografía de moda lo saben, cuando hablamos del espacio en la fotografía de moda al punto que he llegado a definirla como la integración de  una modelo, una presencia y un espacio dentro de una estética fotográfica. En muy pocas publicaciones nacionales he encontrado este crédito, aunque ya encuentra uno a personas interesadas en realizar esta labor. En realidad en nuestro medio somos más de locaciones, que de construcciones de espacios, pero la escenificación lentamente va ganando terreno.

Por último El jefe de estudio, no es un asistente aunque podría llamarse primer asistente de fotografía, mas su función no es cargar, empacar y ayudar. Su función es desarrollar la imagen bajo las instrucciones del fotógrafo, en muchos casos hacer la primera toma y entregarla para revisión. Inicialmente podría sonar una función para  aparentar ser un  fotógrafo/divo, pero tiene una razón de ser al alejar al fotógrafo de los problemas de la realización de la imagen,  le permite mirarla de una manera más crítica. El estar involucrado en la realización de la imagen condiciona lo que se ve, quitando objetividad en el proceso. Con un jefe de estudio, el fotógrafo está involucrado en la planeación y delega la realización en las etapas iniciales,  su primera mirada a la imagen es un contraste entre  lo que se planeó y lo que se ha realizado, una mirada fresca y descansada, por no estar involucrado en la realización,  que permite evaluar con  rapidez si se está logrando lo planeado.

Como ven, es mucha gente la que está en una imagen de moda, es el trabajo de un gran equipo de personas. Es por eso que los integrantes del equipo de trabajo y sus representantes al publicar estas imágenes deberían dar crédito a todos sus realizadores. 
No hay razón en las redes sociales de subir nuestro trabajo sin compartir los créditos de todos aquellos que ayudaron a realizarló.

Un llamado de atención para modelos y sus agencias, además de maquilladores peinadores, estilistas, productores, directores de arte, escenógrafos, asistentes, directores de estudio,  etc. Pongan créditos, etiqueten, usen cualquier herramienta para dar el reconocimiento a los que colaboraron con la construcción de la imagen, es el trabajo de todos, y en este nuevo medio de las redes sociales es necesario  crear una cultura sobre la divulgación de nuestro trabajo.

Es muy común ver nuestro trabajo, y el de los demás involucrados, en redes sociales sin los respectivos créditos, solo el del interesado: fotógrafo, diseñador o agencia de modelos principalmente. En una imagen hay muchos derechos conexos y es un principio de profesionalización y de reconocimiento del trabajo en la creación de una imagen, que estas siempre lleven la mayor cantidad de créditos posibles. 

No podemos seguir ignorando el trabajo de los demás en nuestro beneficio.




[i] Tomado de la definición del curso de estilismo del Instituto Europeo de diseño (www.ied.es)
[ii] Tomado de la definición de director de arte de Luis Maran (www.luismaran.com)

martes, 31 de mayo de 2011

Diva/Modelo






¿Cuándo supiste que querías ser modelo?
- Yo diría que fue antes de repetir el segundo grado. Vi mi cara reflejada en una cuchara mientras comía mi cereal. Recuerdo que pensé: guau, eres ridículamente bien parecido. A lo mejor puedes convertir eso en una carrera.
- ¿Haciendo qué?
- Siendo profesionalmente bien parecido.
      – Zoolander –



"La mayor recompensa de nuestro trabajo no es lo que nos pagan por él, sino aquello en lo que nos convierte".
– John Ruskin –





Hablaba hace días acerca de la profesionalización del sector. Una historia que he escuchado en estos días me invita a hacer la presente entrada; en realidad esta historia en particular es una versión a citar de muchas en general que uno escucha. No menciono el nombre del cliente, el fotógrafo ni el resto del equipo de trabajo; así muchos podrán creer que me refiero a ellos.

Resulta que había que hacer fotos para una marca de ropa, y como es costumbre consiguieron un fotógrafo, una modelo, una locación.  Para iniciar la sesión había que maquillar a la modelo, esta sugiere un maquillaje, el que le gusta,  muy distinto a lo planeado para la sesión. Como el maquillaje siguió según lo planeado manifestó su inconformidad y luego mientras se cambiaba se maquilló ella, cambio de maquillaje de uno sencillo a uno cargado casi para salir a matar, cambio que todos notaron y con el cual se realizaron las fotos.

La profesionalización empieza, repito nuevamente, cuando las modelos entienden que son un lienzo para la realización de un trabajo y si no están de acuerdo con el trabajo que se realizará con ellas simplemente no aceptan. Eso lo entienden los actores por ejemplo, si no se consideran aptos para el papel o si les representa inconvenientes ya sea por el tipo de escenas o por el tipo de personaje a representar simplemente no aceptan.  Volviendo a la modelo, si no está conforme con los diferentes tipos de maquillajes, ropa, accesorios, estilismo o actitudes que la marca usa; en otras palabras no quiere o puede asumir la personalidad de marca para la cual  va a trabajar en un acto de decencia no acepta el negocio.  En muchos de los casos debería  dejar de  llamarse modelo y autodenominarse diva. Porque es muy distinto que se contrate una celebridad como legitimador para una marca ya que al seleccionarla se sabe que ella representa sus valores.

Estas divas que se creen supermodelos sin haberlo sido, no saben que hay que hacer supertrabajos, supercomplicados, superexigentes ellas no están ahí únicamente por su apariencia. Para rematar, la diva del ejemplo a las cuatro de la tarde ya estaba cansada y se quería ir.  Empato esta historia con una anécdota; hace años veía con frecuencia al final del día de realización para determinado catálogo que las pieles se veían sucias y con problemas, luego de varios reclamos al personal de maquillaje y algunas sesiones para ese catálogo descubrí que el maquillador nada tenía que ver, era la modelo que entre cambio y cambio se retocaba su  maquillaje, con un poco de polvo, no solo creando un reclamo innecesario con el maquillador sino tirándose el trabajo de éste y el mío ya qua al final implicaba una cantidad mayor de retoques.

¿Quién debe poner en cintura a una modelo en estas situaciones? Inicialmente puede estar el comentario amable del maquillador a la modelo; al no funcionar este debe informarle al fotógrafo que la modelo no esa maquillada como la solicitaron. Ya en este punto el fotógrafo con el apoyo y consentimiento del cliente debe manifestar que sí la modelo no está presentada para las imágenes que se le está pagando para realizar,  se debe estar dispuestos en caso de ser necesario a cancelar la sesión y buscar otra modelo.  Yo en ese caso, por  hacer cultura y sacar el trabajo como se ha planeado seguramente no cobraría mis honorarios por ese día y creo que gustosamente algunos maquilladores harían lo propio.

Si el fotógrafo no dice nada, es error de profesionalismo a mi criterio, es el cliente el que debe poner en cintura a todo el equipo de trabajo: productor, si lo hay, fotógrafo, maquillador y modelo. Porque lo que se está construyendo es la imagen de su marca y un simple cambio de maquillaje, accesorios o la manera de llevar la ropa  puede significar la diferencia entre un tipo de mujer y otro. El tipo de mujer de mi marca y de la marca vecina. Porque la personalidad de marca no es carreta de mercadeo esta debe volcarse en la imagen.  Cuando se trabaja para una marca la imagen debe hablar de esa marca y de nada más; la modelo, los espacios, el estilismo y la solución estética están integrados en función de un lenguaje en concreto.
Una historia más y también verídica es la de una modelo independiente que ese día no quiso trabajar, lo informo luego de que se dignó contestar el teléfono cuando en la producción ya todos reunidos llamaron a averiguar por su retraso.

Una producción no puede depender del temperamento de una autodenominada diva, hay mucho en juego (honorarios del equipo de trabajo, costos de producción, alimentación, desplazamiento, locaciones etc.)  Para que eso suceda.

Porque si no nos profesionalizamos, y para evitar malos entendidos estoy hablando no solo de modelos, sino también de maquilladores, fotógrafos  y clientes (estos últimos buscando una modelo independiente que en algunos casos no da garantías y que el posible beneficio económico de la negociación se diluya la igual que su imagen de marca, si la tienen)  lo  único que seguiremos produciendo en nuestra industria de la moda será ropa y grillas.



Grillas: Entiesase como sinónimo diva o vedette cuya única función es creerse Divina
Los  Invito a leer la entrada Modelos, Actrices, Bailarinas



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